Abstract

Aunque existen diversas perspectivas para explicar la violencia que toma lugar al interior de las cárceles: i) la violencia carcelaria como reflejo de la violencia estructural ii) la violencia como respuesta a las deprivaciones de la vida en prisión, iii) la violencia como importación de repertorios y patrones aprendidos fuera de la prisión y, por último, iv) la violencia como reflejo de las fallas en la gestión penitenciaria, los estudios sistemáticos en Chile y otros países en desarrollo son escasos, lo cua es problemático porque la violencia carcelaria mina todo intento de reinserción social exitoso. Este artículo, utilizando datos de la Primera Encuesta de Percepción de Calidad de Vida Penitenciaria que el autor dirigió en 2013 (Sanhueza, 2015; Espinoza, Martínez y Sanhueza, 2014), presenta una de las primeras aproximaciones empíricas de victimización física entre internos y presenta un modelo de regresión logística para analizar algunas de las variables asociadas a su ocurrencia. Variables asociadas a haber reportado sufrir violencia física por otros internos fueron la violencia psicológica por otros reclusos, reportar una mala relación con los guardias y tener una mala percepción sobre la infraestructura carcelaria (OR=0,86). Finalmente, se discuten los principales hallazgos de esta investigación, se analizan algunas de sus posibilidades y limitaciones y, finalmente, se hacen algunas recomendaciones para futuros estudios y algunas sugerencias para el rol del trabajador social en la reducción de la violencia.