Abstract

En Chile, la mayoría de los actuales establecimientos escolares, fueron construidos durante el siglo XX, entre los años 40 y 80, como parte de las políticas públicas de modernización del Estado. Estas edificaciones sobrepasan su vida útil en más de 30 años, no obstante, siguen funcionando como tales, resistiendo constantes terremotos y diversas condiciones ambientales, con mínimos o nulos recursos para su mantenimiento. La producción arquitectónica de estos locales escolares púbicos, fue llevada a cabo durante aquellos años por la Sociedad Constructora de Establecimientos Educacionales, entidad encargada de gestionar, diseñar, ejecutar y mantener dichos espacios educativos desde 1937 hasta 1985. De la obra realizada por ellos, se puede distinguir dos etapas en los modelos arquitectónicos; la primera, con obras singulares realizadas en estructuras macizas de hormigón y albañilerías de ladrillo reforzadas; y la segunda etapa de obras seriadas, modulares y prefabricadas de acero y hormigón. Todas estas obras cumplían normas sísmicas, existentes en nuestro país desde 1930. Actualmente se observa que las obras del primer periodo han presentado algunas fallas estructurales de origen sísmico y las del segundo periodo un deterioro físico-químico evidente, acorde a la diversidad de sus componentes. A partir de esta situación se realiza una investigación que busca comparar empíricamente el comportamiento de dichos locales frente a las reiteradas acciones sísmicas y las condiciones de deterioro ambiental, analizando las fallas y procesos lesivos, en base a la observación directa y mediciones instrumental no invasiva. En esta instancia se presentarán los resultados del análisis comparativo de 6 establecimientos escolares en la ciudad de Valparaíso, emplazada en la costa del Océano Pacifico, y que ha sufrido desde 1940 a la fecha, al menos 7 terremotos sobre magnitud 7,0 y dos sobre magnitud 8,0.