Abstract

El artículo describe los fundamentos bíblicos y la aplicación estructural del concepto de κοινωνíα–comunión en la Iglesia primitiva. Este concepto de origen bíblico describe la autoconciencia de la Iglesia, que se entiende como una comunión que nace de la participación en el bautismo y la Eucaristía. Esa autoconciencia se expresó, luego, en algunos criterios de discernimiento y en formas estructurales de la Iglesia. Entre los primeros, están los criterios para determinar el canon de las Escrituras y la regla de la fe; entre los segundos, están las diversas formas de expresar la sinodalidad de la Iglesia, el ministerio apostólico y la idea de comunión en las cosas santas.