Abstract

El presente trabajo se orienta a abordar la acuciante cuestión de la especificidad de la mujer en la obra de Edith Stein, iluminada por el aporte de la poetisa chilena Gabriela Mistral. Para ello, se examina a “la mujer como tal”, teniendo en cuenta la individualidad en vistas a destacar el valor que le es propio. Se trata de penetrar en el “yo irreductible” que habita en su comprensión, tomando en cuenta tal especificidad, que en la mujer se gesta en la medida en que se autorrealiza, “perdiéndose a sí misma”. De este modo, el acontecimiento de la donación y entrega es anticipado por el mismo Espíritu Santo, quien la sostiene y perfecciona. La lectura desde la antropología filosófica-teológica y el comentario a la glosa mistraliana en su conjunto, permite indagar esta propuesta pneumatológica y trinitaria.