Abstract

La realidad actual exige a los docentes universitarios adoptar un modelo de enseñanza que redunde en el incremento de la participación activa del estudiante durante su proceso de aprendizaje. En esta línea, es numerosa la literatura que evidencia la implementación del enfoque metodológico activo en las aulas de ingeniería. Sin embargo, distintos estudios afines a la temática, coinciden en afirmar que el fracaso de muchas de las estrategias aplicadas en pro del aprendizaje activo en estas carreras, se debe al desconocimiento de la diversidad de estilos que existen entre los alumnos a la hora de acceder, procesar y asimilar la información recibida. A este respecto, el análisis sobre los estilos de aprendizaje en carreras de ingeniería es un tema en auge que permite ir definiendo las herramientas a diseñar por los docentes para lograr que el alumno asuma el rol protagónico. En este sentido, investigaciones recientes sugieren que el modelo de “clase invertida” o Flipped Classroom, por la multiplicidad de herramientas susceptibles de ser implementadas bajo esta metodología, resulta pertinente para atender esa variedad estilística. Esta investigación surge, por una parte, para aportar evidencia que determine la existencia de diversos estilos de aprendizaje en ingeniería, y, por otro lado, para sugerir una matriz que ayude a los docentes a diseñar una “clase invertida” atendiendo a necesidades percibidas