Conservación de Recursos genéticos ex situ en Chile, frente al cambio climatico
Abstract
Entendiendo que el enfoque genético es fundamental en el desarrollo de una estrategia de gestión de la biodiversidad, es preciso incorporar en las actuales iniciativas de conservación el concepto de recursos genéticos, entendidos estos como todo aquel material genético de valor actual o potencial. La diversidad genética es una medida de biodiversidad que permite una descripción detallada de la salud de la población, distinto de la medida de biodiversidad que mide la salud del ecosistema. La definición de recursos genéticos forestales (RGF) incluye una componente de valorización de uso que ha estado ausente de las consideraciones pasadas y actuales respecto de la priorización de la conservación. Este nuevo nivel de detalle (valor de uso actual o potencial) no ha sido bien representado y es urgente su adecuada incorporación en las estrategias actuales. Incluso, desde la óptica de los tamaños poblacionales óptimos de conservación, aunque a futuro la superficie destinada a conservación in situ aumentara, esto no implicaría necesariamente un mejor nivel de conservación genética. Ejemplo de esto es lo que ocurre con la superficie actual del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE) en Chile, en la que algunos ecosistemas están sobre representados (Tipo Lenga) desde el punto de vista de la conservación genética y, a la inversa algunos están sub representados (aquellos en que participa raulí). La afirmación que la variación genética es un requisito indispensable para la supervivencia y reproducción de las especies en el largo plazo y en un entorno cambiante fue desarrollada por el profesor Gene Namkoong durante muchos años de su vida, quien planteó además que la variación genética es dinámica, cambiando con el tiempo, y es por esa razón que los genes existentes no deben ser “congelados”, por el contrario, deben constituir la base para la adaptación y variación genética futura de las poblaciones. De igual forma, Ledig (1986) estableció que la conservación genética de los recursos forestales es fundamental para mantener la diversidad genética de poblaciones viables en el largo plazo, así como para conseguir una oferta permanente de genes para las necesidades de los programas de mejora genética. Por lo mismo, este autor hace un llamado a la implementación de iniciativas de conservación de recursos forestales con enfoque genético. En Chile, Ipinza et al. (1998) han propuesto un muestreo intensivo para conformar poblaciones de mejoramiento genético para las especies nativas raulí (Nothofagus alpina) y roble (Nothofagus obliqua), considerando también las fuerzas del cambio climático (Ipinza, 2000). Estas poblaciones de mejoramiento, según Namkoong (1997) son un importante componente de la conservación, al punto que, si se las estructura adecuadamente, pueden ser el único elemento que se requiera para hacer conservación efectiva. Sobre la base de los antecedentes expuestos, se plantea la necesidad de incorporar a las estrategias actuales de conservación de la biodiversidad el enfoque genético, como complemento al enfoque ecosistémico actualmente en uso. Para ello se debe tener presente lo establecido por Eriksson (2001) en orden a que la sociedad debe salvaguardar el potencial de adaptación como el principal objetivo de la conservación genética. Además, será necesario priorizar un grupo acotado de especies en el país, sobre la base de consideraciones sociales, científicas, técnicas, ecológicas y económicas, pues pensar en una conservación total de alcance nacional en una primera etapa es inviable, poco realista y entraría en conflicto con las dinámicas actuales del uso del territorio. En consecuencia, se plantea delinear el presente capítulo, en el ámbito científico, económico e institucional, sobre la base del desarrollo conceptual de la estrategia de conservación genética de Nothofagus alpina (Poepp. et Endl.) Oerst. (=N. nervosa) y Nothofagus obliqua (Mirb.) Oerst., y esto dentro del marco de los actuales desafíos que impone el cambio climático en materia de uso, protección y conservación de bosques. Para proyectar el modelo a otras especies forestales en Chile se establece una priorización de las especies forestales en función de su vulnerabilidad al cambio climático, siendo las especies más prioritarias las primeras candidatas para ser incluidas en un proceso de conservación dinámica (Eriksson et al., 1993). El proceso de priorización se realiza utilizando la matriz de St. Clair y Howe (2011), no obstante, para ejecutar y monitorear el procedimiento de conservación propuesto por Yanchuk (2001) en las especie vulnerables al cambio climático, se requiere además identificar y establecer las brechas en investigación en el corto, mediano y largo plazo.
Más información
Fecha de publicación: | 2015 |
URL: | https://www.researchgate.net/publication/282647404_Conservacion_de_Recursos_geneticos_ex_situ_en_Chile_frente_al_cambio_climatico |