Abstract

Las fotografías son un ente esencial en el ejercicio periodístico, y es que son el aspecto material clave para la legitimación y representación de mensajes simbólicos en la audiencia. Este recurso es el principal aliado de los grupos de poder en momentos de crisis, quienes aprovechan el espacio visual para elaborar diversas estrategias mediadas para la construcción de diferentes realidades sociales parcializadas y, paralelamente, excluir o promover creencias, legitimando pensamientos e imaginarios de acuerdo a las conveniencias hegemónicas. Y es en un escenario de revueltas, en un Chile en disputa social, que los grupos de poder emplean este recurso de forma explícita, con el fin de generar por todos los medios la división de un “nosotros”-“ellos” en la población. El primero de estos (“nosotros”) está alineado al poder -político, económico, social-, y el segundo (“ellos”), asignado a una contraparte que no tiene rostro, pero que, mediante esta táctica visual, se busca corporeizar y estereotipar en aquel “enemigo poderoso e implacable”, el cual hay que identificar y destruir. De esta manera, este escrito busca identificar los elementos esteriotipantes presentes en las fotografías de prensa, por medio de un análisis sobre la mirada de los medios de prensa de circulación nacional del país y, así, reflexionar, desde una óptica americana, la utilización de patrones visuales y recursos asociados a la: afectividad, estética e información. Desde estas tres dimensiones, se dirigirán discusiones sobre el tratamiento de las fotografías ligadas a la práctica del miedo-memoria social, y a la recepción -y devoración- de las imágenes mediadas en un país que consume “realidades” por medio de la prensa, y que vive en una trama visual manipulada mayoritariamente por la triada hegemónica del poder, los cuales buscan politizar la mirada a su voluntad y corporizar a ese “enemigo interno” que hay que temer.