Abstract

Este capítulo busca visibilizar los derechos de los pueblos originarios que habitan en Chile desde una doble perspectiva. Por una parte, como una tradición jurídica autónoma que debiera ser considerada como parte de las fuentes del derecho en el ámbito interno. Por otra, como parte de las obligaciones del DIDDHH que obligan al Estado de Chile y que una vez ratificados y vigentes, en virtud del artículo 5° inciso 2° de la Constitución, se incorporan al ordenamiento constitucional, y específicamente, a nuestro catálogo de derechos fundamentales. Este capítulo discutirá algunos aspectos de la dogmática de los derechos fundamentales de los pueblos originarios: concepto, titularidad, destinatarios, límites y colisiones de derechos territoriales y culturales, tanto en el ámbito nacional e interamericano en doctrina y jurisprudencia. No obstante una multiplicidad de instrumentos internacionales, existe una tensión en el seno de la aceptación de los pueblos indígenas como sociedades permanentes por parte del DIDDHH ya que su reconocimiento ha sido subsumido por categorías universales, primordialmente occidentales y que, en parte, perpetúan tareas civilizadoras. Ello ha hecho que no siempre se aluda a sus limitaciones; así, por ejemplo, el discurso de los derechos humanos ha sido criticado por su incapacidad de interrumpir el pasado colonial17 o en otras ocasiones por adecuarse sin mayores dificultades al sistema capitalista neoliberal18. En parte intentaremos develar estas tensiones en el presente capítulo.